Que sonrías siempre como cuando comimos esa comida tan rica con un Loro silbando de espectador.
Que sonrías (y sigas masajeandome) como esperando en la cola de la cafetería donde te ponen Eustaquio en el café.
Que sonrías y tus ojos griten igual que cuando viste magia en el ordenador del estudio. Igual que cuando viste el tatuaje en mi.
Sabes… hubo momentos en los que tu mirada me encantó, estaba iluminada; y hubo otros en los que me entristeció lo que vi.
Te aseguro que almenos mientras estemos juntos; tu mirada será luz, que es lo que tú eres bonito.
Flor🌹